La
brecha digital tiene las siguientes implicaciones para la enfermería:
Diferencia en
la posibilidad de formarse como enfermero:
Los enfermeros
como profesionales nos debemos de formar continuamente, si no existen las
mismas condiciones de acceso a Internet, no se dispone equitativamente de sus
ventajas (búsqueda de información, comunicación con otros enfermeros, búsqueda
de trabajo, acceso a noticias actuales, divulgación, gestión…)
Diferencias en
el ejercicio de la profesión:
Las NTIC cada
vez están más integradas en la asistencia sanitaria, facilitando el trabajo de
las enfermeras por lo que la carencia de acceso a estas nuevas tecnologías
sitúa inmediatamente en una posición de desventaja.
La enfermería
actualmente puede utilizar las NTIC, entre otras cosas, para la promoción de la
salud y el cuidado de personas, pero la brecha digital da lugar a personas
totalmente incomunicadas y es más difícil acceder a ellas para mejorar su
calidad de vida.
Referente al
párrafo anterior, hay una imposibilidad para ayudar a los pacientes, como a los
discapacitados:
Actualmente las
NTIC están disponibles para todos los miembros de la sociedad, tiene
aplicaciones muy útiles para los discapacitados y es un derecho el acceso a
estas ayudas por lo que la brecha digital es un obstáculo injusto.
Por último, la
brecha digital es un inconveniente para la investigación enfermera:
Para la
concreción de un marco teórico se necesita contrastar información de muchos
sitios y épocas, y realizar actividades que sin poder acceder a Internet
resulta muy complicado.
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